¡Amó los cheesecake! Y cuando encontré la siguiente pagina: www.101cheesecakerecipes.com mi mundo se revoluciono.
Admito que para mis cumpleaños he preferido un cheesecake a una torta.
Que normalmente es lo único que pido cuando tengo la oportunidad de pasar a un café. Pero, siempre, salgo desilusionada con lo que encuentro.
Es por esto que al encontrar esta pagina, se ampliaron mis horizontes, y descubrí que hacer un cheesecake no es tan difícil ni tan engorroso como quieren hacernos creer.
Es cierto que hay ciertos ingredientes que son caros, o que hay tipos de cheesecake que son más difícil de elaborar. Sin embargo, existe una receta básica que es muy fácil de aprender, económica y con muy buenos resultados.
En este breve tutorial, les presentare la receta más sencilla para la elaboración de este.
Para darle un giro mas entretenido, lo monte en porciones individuales, y gracias a un regalo de una amiga, tendrá nísperos.
Necesitaremos para 10 unidades individuales
Para la masa:
1/2 paquete Galletas de vino o galletas tradicionales sin crema.
1 cucharada sopera de mantequilla con o sin sal (a gusto)
2 cucharadas soperas de azúcar granulada.
Para el relleno:
½ paquete de queso philadelphia
½ taza de crema de leche
4 cucharadas soperas de azúcar flor
1 huevo
Nísperos lavados, pelados y cortados (o fruta a elección)
Almendras trituradas gruesas (o cualquier fruto seco a elección)
Esta receta es la simplificación de las recetas que encontraran en la página que les nombre en un principio. Nació de la necesidad de utilizar ciertos productos que normalmente andaban rondando en mi refrigerador. Y, saciar las ganas de tener un cheesecake después de almuerzo.
Con respecto a la masa. Normalmente tengo dando vueltas por ahí, bases de galleta que no he utilizado. Cuando no tengo de estas, las reemplazo por galletas de vino.
La masa base la hago con ellas.
Parto moliéndolas hasta que queden totalmente desmigadas, y formo una masa con la mantequilla y el azúcar.
Luego en un molde de quequitos, ayudada de las capsulas de papel, distribuyo la masa para que sirva de base a mi cheesecake.
Es importante ponerla en la base y presionarlo con los dedos para luego refrigerarlas al menos 30 minutos para que adquiera consistencia.
Mientras trancurrre el tiempo de mis bases en el refrigerador corto mis frutas, en este caso los nísperos y preparo el relleno.
Se debe tener el queso philadelphia a temperatura ambiente unos 10 minutos antes de comenzar. Para que sea más fácil darle cremosidad con ayuda de la batidora.
Continuo con la mezcla, agregando el azúcar flor y sigo batiendo (no batan tan rápido o el azúcar flor saltara para todos lados). Luego la crema de leche y al final el huevo entero.
Quedara más menos así:
En todo este proceso, ya habrá pasado el tiempo necesario de refrigeración.
Prendo mi horno a unos 180ª Celsius (horno fuego medio), para que cuando tenga listo mi montaje tenga la temperatura suficiente.
Procedo a ensamblar.
Primero agrego los trozos de níspero junto con las almendras de manera uniforme en todos mis moldes.
Luego con ayuda de una cuchara grande, lleno cada molde con la mezcla de queso.
¡Y al horno hasta que doren!
Los dejo enfriar en el molde al menos una hora dentro del horno, y luego los refrigero una noche.
Estarán cremosos, y crocantes en la base a la mañana siguiente.
Sabrosos y sencillos son un postre rápido y muy versátil ya que puedes cambiar la fruta y obtener un sabor completamente distinto.
Frutas recomendadas: frutos rojos en general, duraznos, damascos, higos para los aventureros; siempre fruta fresca.
Nos leeremos en otro tutorial.
Memu